Friday, September 21, 2007

Entrevista con el caricaturista amenazado por Al qaeda Lars Vilks

Lars Vilks (Helsingborg, Suecia, 1946) es un artista irreverente que acaba de entrar en un mercado macabro que ha puesto precio a su vida: 72.000 euros. El fanático que pide su cabeza -el terrorista Abu Omar al Baghdadi, vinculado a Al Qaeda- sube su recompensa hasta los 110.000 euros si al artista se le "sacrifica como un cordero". O sea, si se le degüella.
Vilks quiso poner a prueba los límites del arte y se ha dado de bruces con los límites de la libertad de expresión, con su propia vida en juego. No son buenos tiempos para la sátira. Vilks dibujó a Mahoma con cuerpo de perro, pero ninguna sala quiso exhibir sus caricaturas alegando siempre motivos de seguridad. Entonces, varios periódicos suecos las publicaron y empezaron a llover las condenas de los mismos que en 2006 llamaron a la guerra santa contra el periódico danés Jyllands-Posten por haber publicado caricaturas "ofensivas" del profeta: Irán, Pakistán, Afganistán, Egipto, Jordania, la Organización de la Conferencia Islámica...
Finalmente, llegó la amenaza envuelta de euros de Abu Omar al Baghdadi, que también ha ofrecido dinero para que se asesine al redactor jefe de Örebro, uno de los diarios que publicó la viñeta. Vilks, que ya no puede dormir en casa por motivos de seguridad, atendió a este periódico en conversación telefónica.
Pregunta. ¿Tiene miedo?
Respuesta. Obviamente, lo que estoy viviendo no es agradable, pero no tengo miedo. La policía se ha tomado en serio las amenazas y ya no puedo dormir en casa; voy cambiando de lugar y me parece todo muy extraño.
P. ¿Cuándo cree que podrá volver a casa?
R. No tengo ni idea. Nadie lo sabe, pero los agentes me han avisado que me prepare porque la situación puede alargarse. Quizá pasarán meses. Y entonces será el momento más peligroso porque ya no habrá nadie tan pendiente de mí...
P. Inicialmente usted se tomó las amenazas con humor. Incluso llegó a decir que le parecía demasiado barato el precio que han puesto a su cabeza teniendo en cuenta las cifras que se mueven en el mundo del arte. ¿Sigue de tan buen humor?
R. Es que el humor forma parte de mi obra y de mi forma de ver la vida. Lo mejor es integrarlo todo en esta clave; incluso esta situación tan extraña. Pero al mismo tiempo estoy preocupado. Sería absurdo negarlo.
P. Todo empezó con la negativa de las galerías de arte sueco a exponer su trabajo, en julio. ¿Qué opina de su actitud?
R. Alegaron motivos de seguridad y lo puedo entender, pero es una equivocación. Su decisión es innecesaria y contraproducente: es la censura lo que hace que el caso llegue a la prensa y el problema crezca. Es esta censura inicial lo que genera reacciones.
P. ¿Se han puesto en contacto con usted tras las amenazas?
R. No, ni lo esperaba.
P. ¿Qué pretendía con su obra? ¿Provocar?
R. Yo soy del mundo del arte y lo que quiero es discutir, debatir. El objetivo inicial afectaba a un público muy limitado: explorar los límites del mundo del arte. ¿Qué puede hacerse? ¿Qué no puede hacerse? ¿Hay que ceñirse a lo políticamente correcto? Éste era mi propósito, pero luego ya pasó todo a otro nivel.
P. ¿A qué nivel?
R. Al de la libertad de expresión. ¿Realmente todo puede ser criticable y objeto de sátira? ¿Debe haber excepciones? ¿Puede haberlas en nuestras sociedades? Es decir, ¿puedo hacer obras que molesten a unos, pero debo evitar entrar en terrenos que molestan a otros? Planteándolo con claridad: ¿debo hacer una excepción con la crítica al islamismo? Mi idea es que nuestras sociedades no pueden aceptarlo: la religión musulmana no puede quedar protegida de la crítica y la sátira.
P. ¿Cómo han reaccionado los musulmanes suecos?
R. Muy bien; estoy muy contento al respecto. En Suecia, las organizaciones musulmanas han manifestado tajantemente su rechazo a las amenazas a través de comunicados muy claros. En todo el país ni una sola voz ha defendido esta actitud intolerante. No se sabe exactamente quién está detrás de las amenazas, pero son exteriores.
P. Parece casi que está satisfecho con los resultados de su, digámoslo así, experimento.
R. Es que desde este punto de vista el balance es positivo. Sólo la ínfima minoría muy extremistas se queda fuera de este consenso. Todos aceptan que no se puede amenazar de muerte a alguien que ha hecho unas caricaturas que no te gustan.
P. Si pudiera volver atrás, ¿dibujaría de nuevo las mismas caricaturas sabiendo las repercusiones que han tenido?
R. Es difícil decirlo, pero creo que sí. Seguí con mi trabajo pese a considerar que esto que ahora sucede podía pasar, por increíble que parezca. Pero están en juego cuestiones muy importantes y el riesgo merecía la pena.
P. ¿No teme que la polémica se vuelva incontrolable, como sucedió en Dinamarca?
R. Este caso es distinto. Aquí no había ninguna agenda política oculta y en Dinamarca no estoy tan seguro de ello. Pero creo que nadie está interesado en que se repita lo que pasó entonces. Desde luego, la sociedad sueca lo ha dejado clarísimo.

Thursday, September 20, 2007

¿Prohibir el islam?

Daniel Pipes analiza a raiz de las ultimas propuestas para suprimir el corán si es viable o no suprimir el islam y da sus propuestas
por Daniel Pipes
De vez en cuando, los no musulmanes plantean la idea de prohibir el Corán, el islam o a los musulmanes. Los ejemplos de este mes incluyen los llamamientos por parte de Geert Wilders, un líder político de los Países Bajos, a prohibir el Corán (que compara con el Mein Kampf de Hitler) y dos políticos australianos, Pauline hanson y Paul Green, que exigen una moratoria en la inmigración musulmana.
¿Qué ha de discernir uno de estas iniciativas?
En primer lugar, algo de historia. Existen precedentes de una era anterior, en la que los gobiernos cristianos intolerantes obligaban a los musulmanes a convertirse (sobre todo en la España del siglo XVI) y otros respaldaban con firmeza las conversiones, especialmente de la élite (como en la Rusia de los siglos XVI y XVII). En los tiempos modernos, sin embargo, con la libertad de expresión y la libertad religiosa establecidas como derechos humanos básicos, los esfuerzos de protección frente a la intolerancia mediante la prohibición del Corán, el islam o los musulmanes han fracasado visiblemente.
En quizá la tentativa contemporánea más seria de prohibir el Corán, un colectivo hindú argumentaba en 1984-85 que las escrituras islámicas contienen "numerosas sentencias, repetidas en el libro una y otra vez, que con motivo de la religión promueven la disonancia, la sensación de animadversión, el odio y las rencillas entre distintas comunidades religiosas e incitan a la gente a cometer actos de violencia y perturbar la paz pública".
La presentación de esta demanda, conocida como "la petición coránica de Calcuta" ante los tribunales provocó disturbios y muertos en Bangladesh. El caso alarmó tanto a Nueva Delhi que el fiscal general de La India en persona participó en las audiencias previas para oponerse a la petición que, naturalmente, fue desestimada.
Esta solicitud temprana sentó precedente en términos de recoger versos coránicos desagradables. Otros esfuerzos han sido más en retóricos y menos prácticos. El más consecuente fue el de Pym Fortuyn en los Países Bajos, con el objetivo de poner fin a la inmigración musulmana. De no haber sido asesinado en el 2002, podría haber explotado este tema como pasaporte al primer ministerio.
Roberto Calderoli, el coordinador de la Liga del norte en Iitalia, escribía en el 2005 que "el islam ha de ser declarado ilegal hasta que los islamistas estén dispuestos a renunciar a esas partes de su doctrina pseudo política y pseudo religiosa que glorifican la violencia y la opresión de las demás culturas y religiones".
El diputado británico Boris Johnson precisaba en el 2005 que la aprobación de una Ley de Odio Racial y Religioso "tiene que significar la prohibición de la lectura -- en público y en privado -- de una gran cantidad de pasajes del propio Corán". Su observación movió a una delegación musulmana a pedir garantías (que recibieron) del ministerio de que tal prohibición no tendría lugar. Patrick Suideo, del Instituto para el Estudio del Islam y el Cristianismo, en el 2006 pedía la prohibición de una traducción del Corán, El noble Corán: una nueva lectura de su significado en inglés, porque "precisa una estrategia para matar infieles y a favor de la guerra contra ellos".
Otros países occidentales fueron testigos de esfuerzos menores. . El partido Kristiansand Progress de Noruega intentaba prohibir el islam en el 2004 y el Bürgerbewegungen der Bundesverband de Alemania intentaba prohibir Corán en el 2006 argumentando su incompatibilidad con la constitución alemana. "Detengamos la islamización de Dinamarca" reclamaba a comienzos del 2007 la prohibición de partes del Corán y de todas las mezquitas, declarándolas inconstitucionales. "Catch the fire ministries" sostenía en Australia en el 2004 que "puesto que el Corán contradice la doctrina cristiana en un buen número de lugares, bajo las leyes de blasfemia, es así ilegal".
Por todas partes, escritores individuales han realizado las mismas demandas. Alain Jean Mairet en Suiza es el estratega de un plan en dos partes, popular y jurídico, con el objetivo de que "todos los proyectos islámicos en Suiza acaben siendo imposibles de completar". En Francia, un escritor anónimo de la página web Liberty Vox quiere prohibir el islam, al igual que Warner Todd Husston en Estados Unidos.
La película de 2006 "V de vendetta", a propósito, retrata una Inglaterra en el futuro en la que el Corán está prohibido.
¿Mi postura? Comprendo el apremio basado en la seguridad por excluir el Corán, el islam y a los musulmanes, pero estos esfuerzos son demasiado genéricos, mezclando pasajes inspirativos con los desagradables, a reformistas con extremistas, a amigos con enemigos. Asimismo, se ignora la posibilidad de un cambio positivo.
Más práctico y centrado sería reducir las amenazas de la jihad y la sharia prohibiendo las interpretaciones islamistas del Corán, así como el islamismo y a los islamistas. Existen precedentes. Un Corán de patrocinio saudí fue retirado de Las bibliotecas escolares. Hay predicadores que han ido a prisión por su interpretacion del Corán. Las versiones radicales del Islam son procesadas criminalmente. Las organizaciones son ilegalizadas. Hay políticos que han pedido a los islamistas que se vayan de sus países.
El Islam no es el enemigo, pero el islamismo sí. Tolerar el islam moderado, pero erradicar sus variantes radicales.

Sunday, September 16, 2007

Israel lanzo un ataque sorpresa a lo que se denomina un "deposito de material nuclear sirio"

durante varias semanas se especulo con un incidente que los sirios denunciaron en el cual aviones israelis incursionaron en su territorio,este domingo el periodico "The Times" publico un articulo en donde explico que el raid fue hecho para destruir un deposito de material nuclear que los sirios acababan de adquirir a norcorea,el ataque fue realizado por aviones F-15I,que tuvieron ayuda desde tierra por unos comandos israelis que les marcaron los blancos con rayos lasser,una nota muy importante de resaltar es que los sirios tienen un mejor y mas moderno sistema de defensa antiaereo que los iranies y eso no impidio ni frustro el ataque israeli
Israelis ‘blew apart Syrian nuclear cache’
Secret raid on Korean shipment
Uzi Mahnaimi in Tel Aviv, Sarah Baxter in Washington and Michael Sheridan
IT was just after midnight when the 69th Squadron of Israeli F15Is crossed the Syrian coast-line. On the ground, Syria’s formidable air defences went dead. An audacious raid on a Syrian target 50 miles from the Iraqi border was under way.
At a rendezvous point on the ground, a Shaldag air force commando team was waiting to direct their laser beams at the target for the approaching jets. The team had arrived a day earlier, taking up position near a large underground depot. Soon the bunkers were in flames.
Ten days after the jets reached home, their mission was the focus of intense speculation this weekend amid claims that Israel believed it had destroyed a cache of nuclear materials from North Korea.
The Israeli government was not saying. “The security sources and IDF [Israeli Defence Forces] soldiers are demonstrating unusual courage,” said Ehud Olmert, the prime minister. “We naturally cannot always show the public our cards.”
The Syrians were also keeping mum. “I cannot reveal the details,” said Farouk al-Sharaa, the vice-president. “All I can say is the military and political echelon is looking into a series of responses as we speak. Results are forthcoming.” The official story that the target comprised weapons destined for Hezbollah, the Iranian-backed Lebanese Shi’ite group, appeared to be crumbling in the face of widespread scepticism.
Andrew Semmel, a senior US State Department official, said Syria might have obtained nuclear equipment from “secret suppliers”, and added that there were a “number of foreign technicians” in the country.
Asked if they could be North Korean, he replied: “There are North Korean people there. There’s no question about that.” He said a network run by AQ Khan, the disgraced creator of Pakistan’s nuclear weapons, could be involved.
But why would nuclear material be in Syria? Known to have chemical weapons, was it seeking to bolster its arsenal with something even more deadly?
Alternatively, could it be hiding equipment for North Korea, enabling Kim Jong-il to pretend to be giving up his nuclear programme in exchange for economic aid? Or was the material bound for Iran, as some authorities in America suggest?
According to Israeli sources, preparations for the attack had been going on since late spring, when Meir Dagan, the head of Mossad, presented Olmert with evidence that Syria was seeking to buy a nuclear device from North Korea.
The Israeli spy chief apparently feared such a device could eventually be installed on North-Korean-made Scud-C missiles.
This was supposed to be a devastating Syrian surprise for Israel,” said an Israeli source. “We’ve known for a long time that Syria has deadly chemical warheads on its Scuds, but Israel can’t live with a nuclear warhead.”
An expert on the Middle East, who has spoken to Israeli participants in the raid, told yesterday’s Washington Post that the timing of the raid on September 6 appeared to be linked to the arrival three days earlier of a ship carrying North Korean material labelled as cement but suspected of concealing nuclear equipment.
The target was identified as a northern Syrian facility that purported to be an agricultural research centre on the Euphrates river. Israel had been monitoring it for some time, concerned that it was being used to extract uranium from phosphates.
According to an Israeli air force source, the Israeli satellite Ofek 7, launched in June, was diverted from Iran to Syria. It sent out high-quality images of a northeastern area every 90 minutes, making it easy for air force specialists to spot the facility.
Early in the summer Ehud Barak, the defence minister, had given the order to double Israeli forces on its Golan Heights border with Syria in anticipation of possible retaliation by Damascus in the event of air strikes.
Sergei Kirpichenko, the Russian ambassador to Syria, warned President Bashar al-Assad last month that Israel was planning an attack, but suggested the target was the Golan Heights.
Israeli military intelligence sources claim Syrian special forces moved towards the Israeli outpost of Mount Hermon on the Golan Heights. Tension rose, but nobody knew why.
At this point, Barak feared events could spiral out of control. The decision was taken to reduce the number of Israeli troops on the Golan Heights and tell Damascus the tension was over. Syria relaxed its guard shortly before the Israeli Defence Forces struck.
Only three Israeli cabinet ministers are said to have been in the know ? Olmert, Barak and Tzipi Livni, the foreign minister. America was also consulted. According to Israeli sources, American air force codes were given to the Israeli air force attaché in Washington to ensure Israel’s F15Is would not mistakenly attack their US counterparts.
Once the mission was under way, Israel imposed draconian military censorship and no news of the operation emerged until Syria complained that Israeli aircraft had violated its airspace. Syria claimed its air defences had engaged the planes, forcing them to drop fuel tanks to lighten their loads as they fled.
But intelligence sources suggested it was a highly successful Israeli raid on nuclear material supplied by North Korea.
Washington was rife with speculation last week about the precise nature of the operation. One source said the air strikes were a diversion for a daring Israeli commando raid, in which nuclear materials were intercepted en route to Iran and hauled to Israel. Others claimed they were destroyed in the attack.
There is no doubt, however, that North Korea is accused of nuclear cooperation with Syria, helped by AQ Khan’s network. John Bolton, who was undersecretary for arms control at the State Department, told the United Nations in 2004 the Pakistani nuclear scientist had “several other” customers besides Iran, Libya and North Korea.
Some of his evidence came from the CIA, which had reported to Congress that it viewed “Syrian nuclear intentions with growing concern”.
“I’ve been worried for some time about North Korea and Iran outsourcing their nuclear programmes,” Bolton said last week. Syria, he added, was a member of a “junior axis of evil”, with a well-established ambition to develop weapons of mass destruction.
The links between Syria and North Korea date back to the rule of Kim Il-sung and President Hafez al-Assad in the last century. In recent months, their sons have quietly ordered an increase in military and technical cooperation.
Foreign diplomats who follow North Korean affairs are taking note. There were reports of Syrian passengers on flights from Beijing to Pyongyang and sightings of Middle Eastern businessmen from sources who watch the trains from North Korea to China.
On August 14, Rim Kyong Man, the North Korean foreign trade minister, was in Syria to sign a protocol on “cooperation in trade and science and technology”. No details were released, but it caught Israel’s attention.
Syria possesses between 60 and 120 Scud-C missiles, which it has bought from North Korea over the past 15 years. Diplomats believe North Korean engineers have been working on extending their 300-mile range. It means they can be used in the deserts of northeastern Syria ? the area of the Israeli strike.
The triangular relationship between North Korea, Syria and Iran continues to perplex intelligence analysts. Syria served as a conduit for the transport to Iran of an estimated £50m of missile components and technology sent by sea from North Korea. The same route may be in use for nuclear equipment.
But North Korea is at a sensitive stage of negotiations to end its nuclear programme in exchange for security guarantees and aid, leading some diplomats to cast doubt on the likelihood that Kim would cross America’s “red line” forbidding the proliferation of nuclear materials.
Christopher Hill, the State Department official representing America in the talks, said on Friday he could not confirm “intelligence-type things”, but the reports underscored the need “to make sure the North Koreans get out of the nuclear business”.
By its actions, Israel showed it is not interested in waiting for diplomacy to work where nuclear weapons are at stake.
As a bonus, the Israelis proved they could penetrate the Syrian air defence system, which is stronger than the one protecting Iranian nuclear sites.
This weekend President Mahmoud Ahmadinejad of Iran sent Ali Akbar Mehrabian, his nephew, to Syria to assess the damage. The new “axis of evil” may have lost one of its spokes.

Saturday, September 15, 2007

Otra vez hay problemas por una nueva caricatura de mahoma, el autor de dicha caricatura es amenazado de muerte por al qaeda

De nuevo la libertad de expresion en occidente es amenazada por la intolerancia musulmana, hay indignacion en el mundo musulman por una nueva caricatura de mahoma, y ahora hasta Al qaeda en irak ofrece una recompensa por el que mate al caricaturista sueco que la hizo:
Al Qaeda pide matar a un dibujante sueco autor de nuevas viñetas de Mahoma
En los dibujos aparecía la cabeza de Mahoma sobre el cuerpo de un perro
ESTOCOLMO.- La organización radical islámica "Estado Islámico de Irak", encabezada por Al Qaeda, ha ofrecido una recompensa de 100.000 dólares para quien asesine al autor de unas nuevas caricaturas del profeta Mahoma que fueron publicadas el pasado mes de agosto por 'Nerikes Allehanda', un diario sueco, después de que varias galerías de arte se negaran a exhibirlas.
Además de al dibujante, Lars Vilks, la organización radical también amenaza con atacar a importantes compañías suecas, según una grabación de audio colgada este sábado en Internet.
En ella, Abu Omar al-Baghdadi, líder del autodenominado "Estado Islámico en Irak", también ofrece 50.000 dólares al que mate al editor del periódico que publicó los dibujos de Lars Vilks.
"De ahora en adelante anunciamos la convocatoria a derramar la sangre de Lars, quien se atrevió a insultar a nuestro profeta (...) y durante este generoso mes anunciamos un premio valorado en 100.000 dólares para la persona que mate a este criminal infiel", afirma Baghdadi en la grabación de 31 minutos. Este líder añade que el premio sería elevado a 150.00 dólares si sacrifican a Vilks "como una oveja", o degollado.
"Nosotros sabemos cómo obligarlos a retirarse y disculparse, y si no lo hacen, entonces pueden esperar nuestros ataques contra su economía y grandes compañías como Ericsson, Volvo, Ikea", indicó.
Tras ser contactado por Reuters, Edvard Unsgaard, portavoz del primer ministro de Suecia, declinó hacer comentarios sobre lo que dijo era un "asunto de política".
¿Falta de respeto, o libertad de expresión?
'Nerikes Allehanda' publicó una imagen de la cabeza de Mahoma sobre el cuerpo de un perro, en lo que dijo era una defensa de la libertad de expresión. Las naciones musulmanas, incluyendo Irán, Pakistán y Afganistán, expresaron su enojo por la caricatura.
Irán, el primer país en protestar contra la caricatura publicada el 27 de agosto, llamó a consulta al encargado de negocios de Suecia en Teherán para quejarse. Los musulmanes consideran que la representación del profeta en imágenes y dibujos es un pecado y que los perros son animales impuros.
El Consejo Musulmán Sueco, una de las mayores organizaciones islámicas de ese país, rechazó las amenazas de Baghdadi.
El año pasado, musulmanes en todo mundo protagonizaron una serie de protestas después de que un diario danes publicase viñetas del profeta Mahoma, que fueron reimpresas por otros periódicos europeos.

La caricatura en cuestion esta muy mal hecha y no es simpatica como la de los caricaturistas daneses del año pasado pero en defensa de la libertad de expresion y en un simbolico gesto de solidaridad con el caricaturista sueco aqui esta:



hay que defender la libertad de expresion en occidente, no es admisible que en occidente no se pueda publicar una caricatura sobre una religion que ni siquiera es mayoritaria en occidente (y que ademas la practican una cantidad minima de occidentales),en occidente se hacen muchas supuestas "obras de arte" con Jesucristo,la virgen Maria etc etc que a mi en lo personal me parecen ofensivas y de muy mal gusto pero no se me ocurriria ni de broma amenazar de muerte o peor aun intentar matar a los autores de esos adefesios y mucho menos la iglesia catolica publica decretos pidiendo que alguien mate a los autores de tales cosas, si eso pasa con la religion que mas se practica en occidente ¿por que se va a censurar una caricatura que les parece ofensiva a los musulmanes? ellos tiene que entender que en occidente hay libertad de expresion y aunque vivan en occidente es igual,tiene que respetar las leyes de los paises donde viven, ya lo dice el refran "a la tierra que fueres haz lo que vieres"

Thursday, September 13, 2007

El nuevo «look» de Al Qaeda

POR STEPHEN SCHWARTZ

LA desarticulación de un complot terrorista islamista esta semana en Alemania es significativa por diversas razones que podrían no ser obvias partiendo de los titulares.
La primera razón es la implicación de un individuo de procedencia étnica turca. El martes, la policía del estado alemán del Rin-Westfalia detenía a 3 hombres, identificados como un turco y dos conversos alemanes al islam (según las leyes judiciales alemanas, sus nombres completos no deben ser revelados). Mientras que la actividad de los conversos en el terrorismo no es algo nuevo, la comunidad turca en Alemania hasta la fecha ha estado libre de la plaga del extremismo religioso. Los inmigrantes kurdos y turcos en Alemania y su descendencia se han visto atraídos al radicalismo nacionalista, pero raramente al fundamentalismo islámico. En general buscan encontrar, y tienen éxito encontrando, un lugar en la sociedad alemana.
El jueves 6 de septiembre, las autoridades germanas estaban aún buscando a alrededor de 10 sospechosos, descritos como una mezcla de alemanes, turcos y otros. Esta vinculación turca es problemática a la luz de la reciente elección del partido religioso sunita Justicia y Desarrollo (AK) en Turquía. Los musulmanes alemanes turcos y kurdos vienen describiendo la infiltración en sus comunidades de fundamentalistas «moderados» desde que los partidos religiosos emergieran como fuerza política seria en Turquía hace más de 20 años. De igual manera, los musulmanes moderados de las zonas colindantes con Turquía y vinculadas culturalmente, los Balcanes y Asia Central, advierten ya de que islamistas turcos, en lugar de islamistas árabes, están empezando a repartir dinero y establecer redes en sus regiones.
El segundo detalle llamativo es el parecido del complot alemán con la conspiración de Londres-Glasgow de finales de junio. En ambos casos, coches bomba llenos de peróxido de hidrógeno iban a destinarse contra aeropuertos importantes. Esto puede indicar una decisión estratégica por parte de Al Qaeda de utilizar métodos rudimentarios para mutilar el transporte aéreo occidental. Cuando la historia de la guerra contra el terror se escriba por fin, podría resultar que el objetivo principal de Al Qaeda es consistente. Repetidamente atenta contra líneas aéreas y aeropuertos en calidad de uno de los objetivos más ricos económicamente -con efecto catastrófico para el sector empresarial global, como hemos descubierto. Los sistemas de transporte público terrestre, como en Madrid en el 2004 o en Londres en el 2005, son aún más vulnerables, pero la dislocación social provocada por los ataques contra esto tiene corta duración.
Al-Qaeda está perdiendo la guerra en Irak. Su fanática dedicación al takfir -la expulsión de la religión y el asesinato salvaje de los musulmanes que no están de acuerdo- de corte wahabí ha alienado a muchos sunitas que antes combatían contra la Coalición encabezada por Estados Unidos y el Gobierno iraquí. Mientras los iraquíes sunitas cambian de bando a nuestro favor, Al Qaeda está enfrascada en transferir el campo de batalla yihadista a Europa, que es el escenario más conveniente, más cercano y más vulnerable.
La Unión Europea no ha formulado aún una estrategia común anti-terror eficaz. La autoridad federal europea está fragmentada y es objeto de caprichos políticos locales -como se vio con la apresurada retirada de los españoles de Irak tras los horrores del tren madrileño. Las diferencias como esa en el pasado entre los musulmanes kurdos, típicamente seculares, y los musulmanes kurdos en Alemania, los distintos grupos de musulmanes árabes y africanos en Francia, y los musulmanes radicales procedentes de Pakistán y La India en el Reino Unido también vienen obstruyendo la respuesta común de la Unión.
Si existe una trampa particular a evitarse a cualquier precio al extraer lecciones del complot alemán es la de aplicar clichés cada vez más comunes acerca del «terrorismo de cosecha propia». La conspiración alemana ya ha sido remontada hasta un grupo uzbeko, la Unión de la Jihad Islámica, que controla centros de entrenamiento en Pakistán. No hay suficientes uzbekos y ni siquiera turcos o paquistaníes suficientes en Alemania para sostener una red islamista radical «de cosecha propia» entre ellos, y en cuanto a los alemanes de origen turco, como indicaba, el fenómeno es nuevo y es importado. En Alemania, al menos, el terrorismo no es «de cosecha propia» con claridad -es una importación exótica, apoyada a través de dinero extranjero.
El grupo que supuestamente dio lugar a la Unión de la Jihad Islámica es el Movimiento Islámico de Uzbekistán (IMU), el cual nunca puso un pie en esa antigua república ex soviética, pero reclutaba uzbecos para combatir en la yihad de Tajikistan y, tras el 11 de Septiembre, en Afganistán. El Movimiento fue barrido en Afganistán, pero algunos de sus miembros huyeron a Pakistán. Al pretender exportar el frente de Irak a Europa, Al Qaeda parece estar intentando aunar cualquier fuerza de la que dispone, dondequiera que pueda encontrarse, y enviarla a Occidente. Su núcleo saudí original quedó herido de gravedad como consecuencia del 11 de septiembre, y sus sucesores se encuentran ocupados aún en Irak.
Al margen de la vigilancia de las autoridades alemanas, que Al Qaeda esté rascando el fondo de sus posibilidades en busca de colectivos terroristas son buenas noticias, porque demuestra que sus filas en todo el mundo no se están viendo abastecidas, incluso si los frentes abiertos pueden incrementarse en distribución geográfica. La dependencia del armamento rudimentario basado en productos químicos corrientes es prueba de que Al Qaeda estaría también agotando su capital financiero y tecnológico.
Lo peor a observarse del caso alemán es la ubicación de campamentos de entrenamiento del terror de la organización uzbeka en Afganistán. ¿Cuándo va el Gobierno de Pervez Musharraf a poner fin al acomodo de los radicales?

Sunday, September 09, 2007

Al qaeda estaba al borde de la muerte pero "resucito" gracias a la invasion de Irak

Loretta Napoleoni experta en terrorismo, hace un analisis sorprendente ya que da una nueva perspectiva de lo que era Bin Laden y Al qaeda, dice que contrario a lo que se creia no era un grupo muy unido ni que todos sus seguidores obedecian a Bin laden ,que habia mucho enojo por la forma en que manejaba a Al qaeda y lo mas relevante del analisis es que segun la autora, Al qaeda habia sido casi destruida tras la invasion de afganistan por los EEUU y que solo gracias a la estupida e injustificada invasion a Irak por los EEUU, Al qaeda revivio por la oleada de enojo e indignacion que recorrio todo el mundo islamico me parecio interesante el analisis por que contradice todo lo que hasta hoy se venia diciendo con datos bien fundamentados y por tanto lo que plantea pudiera ser cierto:
En el otoño de 2004, Al-Sharq al-Awsat, el periódico saudí con sede en Londres, publicó un relato que, según se rumoreaba, había escrito un miembro del círculo íntimo de Al Qaeda. En claro contraste con la imagen habitual de la organización como multinacional del terror, describía un grupo pequeño, plagado de luchas internas y dirigido por un megalómano saudí impopular, Osama bin Laden.
El problema fundamental era la obsesión de Bin Laden con Estados Unidos. El ala moderada de Al Qaeda le reprochaba que confiase en un grupo de patrocinadores saudíes que viajaban libremente a EE UU y que le habían convencido de que era un país débil e incapaz de soportar más de tres golpes: los atentados de 1998 contra las embajadas estadounidenses en África, el atentado de 2000 contra el portaaviones USS Cole y el atentado contra las Torres Gemelas. Los moderados atribuían esta idea a la arrogancia saudí y temían las represalias militares norteamericanas. Como también la temían los talibanes, que en su mayoría despreciaban a Bin Laden y sus amigos saudíes por su ostentación y su sentimiento de superioridad.
Los propios dirigentes talibanes consideraban a Bin Laden como un estorbo. Su obsesión de que los medios occidentales dieran publicidad a su odio hacia EE UU había enfurecido en más de una ocasión al mulá Omar, el líder espiritual talibán, cuyos valedores paquistaníes habían llegado a presionarle para que obligara a Osama a callarse o le expulsara del país. Pero el régimen necesitaba los 30 millones de dólares de renta pagados por los patrocinadores de Bin Laden y la pequeña industria de los campos de entrenamiento; el régimen talibán, que funcionaba como una réplica del califato islámico medieval, sufría una falta crónica de dinero. Y la animadversión del mulá Omar hacia las drogas había limitado la única fuente de ingresos exteriores: el opio.
Los partidarios de la línea dura dentro de Al Qaeda también temían las represalias estadounidenses, aunque por distintos motivos. Ya en 1998, bajo la dirección de Abu Hafas al Masri -uno de los fundadores de Al Qaeda, que murió en Kandahar-, habían presionado a Bin Laden para que adquiriese armas de destrucción masiva o construyera bombas sucias. Su idea era introducirlas de contrabando en Estados Unidos y almacenarlas allí para utilizarlas en el caso de que los estadounidenses invadieran Afganistán. Bin Laden nunca rechazó formalmente la propuesta, pero impidió a Al Masri que la llevara a cabo.
Construir una bomba sucia en Afganistán habría sido sencillo. Los talibanes habían recuperado suficiente cantidad de armas químicas y material radiactivo de la invasión soviética como para poder fabricar más de una, y en Al Qaeda había gente con los conocimientos necesarios para hacerlo. Sin embargo, cuando Al Masri se decidió a preguntar a los talibanes sobre los materiales químicos y radiactivos, descubrió que los habían vendido en secreto a los paquistaníes porque no se fiaban de los árabes. Los miembros de la línea dura pensaron que Bin Laden era el responsable de esa antipatía.
Bin Laden era aún más impopular fuera de Al Qaeda. La arrogancia y el sentimiento de superioridad propios de los saudíes habían deteriorado su imagen entre los yihadistas, jóvenes que veían en él una prolongación de las clases dirigentes saudíes. Entre ellos estaban Jattab, un joven guerrero saudí que, a finales de los noventa, dirigió a los muyahidin en Chechenia, y el jordano Abu Mussad al Zarqaui, que, entre 1999 y 2001, dirigió en Herat un campo de entrenamiento propio, bajo los auspicios de los talibanes.
La popularidad de Bin Laden entre los antiguos muyahidin era menor si cabe. Muchos le consideraban responsable de haber convertido Al Qaeda en una milicia de sus patrocinadores saudíes. Al Qaeda, formada en torno a las enseñanzas del jeque Azzam, nació como brazo militar de una insurgencia musulmana mundial, dentro del ejército de los árabes afganos. Hacia el final de la yihad antisoviética, Azzam empezó a imaginar un Afganistán libre de soviéticos y que fuera un refugio para el futuro ejército internacional de muyahidin, y les instó a independizarse de sus patrocinadores.
Ése fue el momento en el que Osama bin Laden, el representante de hecho de los intereses saudíes en Afganistán, chocó con los intereses del jeque Abdallah Azzam. Bin Laden y sus patrocinadores saudíes querían moldear Al Qaeda para convertirla en una organización independiente del futuro régimen afgano; no les interesaba la consolidación del poder en Afganistán. Desde luego, querían seguir dominando y manipulando el futuro de las brigadas árabes. Según el investigador egipcio Abderrahim Ali, Bin Laden estaba además muy influido por la facción egipcia de la Oficina Árabe-Afgana, que dirigía Ayman al Zauahiri. Este grupo quería incorporar Al Qaeda a las tácticas terroristas y transformarla en una organización armada; al acabar la yihad contra los soviéticos, pensaban servirse de Al Qaeda para impulsar la actividad terrorista en Egipto.
La disputa terminó con el asesinato del jeque Azzam el 24 de noviembre de 1989. A partir de ese momento, Bin Laden y Al Zauahiri se hicieron poco a poco con el control de la Oficina Árabe-Afgana y convirtieron Al Qaeda en una organización terrorista financiada con dinero saudí. El asesinato fue el primero de una serie que acabó con la vida de varios miembros de la Oficina, con reminiscencias de las purgas realizadas por Stalin entre los dirigentes bolcheviques. Estas purgas prepararon el terreno para el primer atentado contra las Torres Gemelas, en 1993. Según Muhamad Sadeq Awda, miembro de Al Qaeda en prisión, Bin Laden ordenó el asesinato de Azzam porque sospechaba que tenía lazos con la CIA. Sin embargo, muchos creen que fue Al Zauahiri, y no Bin Laden, quien ordenó las purgas. Hoy sigue siendo uno de los grandes misterios sin resolver.
En vísperas del 11-S, por tanto, Bin Laden era muy impopular, tanto entre sus seguidores y sus anfitriones como entre los miembros del movimiento yihadista. Como destaca Jason Burke, un premiado periodista de The Observer, Al Qaeda no era una multinacional del terror, sino una pequeña organización bastante desconocida fuera de Afganistán. Y al terminar la batalla de Tora Bora, Al Qaeda era una sombra de sí misma. Varios combatientes fundamentales, como Al Masri, habían muerto durante los ataques de la coalición en Afganistán, y varios millares más habían sido capturados y enviados a Guantánamo; en el transcurso del año siguiente, todos los dirigentes de la organización -excepto Bin Laden y Al Zauahiri- fueron capturados por el Ejército estadounidense y llevados a un lugar no revelado.
También desapareció la obsesión de Bin Laden de llevar el terrorismo al corazón de EE UU. Tras el 11-S, todos los grandes atentados los realizaron grupos locales en sus respectivos países: Pakistán y Bali en 2002; Uzbekistán, Turquía y Casablanca en 2003. La verdad es que el 11-S fue un episodio aislado en la historia de la violencia política islámica, del mismo modo que Al Qaeda era una organización armada islámica que era atípica. Ni el GIA argelino, ni la Yemaa Islamiya indonesia, ni los Hermanos Musulmanes de Egipto, ni el Movimiento Islámico de Uzbekistán habían atacado jamás a un enemigo tan lejano, sino que todos se habían dedicado siempre a los enemigos más próximos, los regímenes oligárquicos que imperan en el mundo musulmán.
La peculiaridad de Al Qaeda se debía a la naturaleza de sus promotores. A finales de los años setenta, varios patrocinadores de Arabia Saudí y el Golfo crearon Daw'ah, una red de organizaciones benéficas, empresas e inversiones directas para difundir la doctrina wahabí -la interpretación más conservadora del islam- en el mundo musulmán. Daw'ah financió a los muyahidin y, tras la victoria en Afganistán, fomentó la violencia islámica en todos los países musulmanes. Desde Uzbekistán hasta Somalia, desde Chechenia hasta Argelia, Daw'ah costeó una serie de organizaciones armadas que luchaban para establecer regímenes acordes con la sharía. Al Qaeda también se benefició del dinero de Daw'ah y Bin Laden fue uno de sus grandes agentes durante los años ochenta en Afganistán. Sin embargo, cuando le expulsaron de Arabia Saudí en los años noventa, se encontró con que no podía usar esos fondos para sufragar una rebelión en el país del que procedían sus donantes. Para esquivar el problema creó una organización armada transnacional cuyos objetivos serían los valedores de los saudíes, es decir, Estados Unidos. Si podía destruir Estados Unidos, podría derrocar el régimen saudí: éste era el mensaje oculto del manifiesto de 1998 contra los cruzados sionistas, suscrito por Al Zauahiri y motor de los atentados contra las embajadas estadounidenses en Kenia y Tanzania y el atentado contra el USS Cole en Yemen.
La ilusión de Bin Laden de que Estados Unidos se desintegraría después del tercer y definitivo ataque es equiparable a la absurda idea del Gobierno de Bush de que Al Qaeda estaba en el centro de una conspiración mundial de organizaciones armadas islámicas. Este engaño constituyó la base de la guerra contra el terror, que pronto se convirtió en una lucha contra las sombras de Al Qaeda. Por ejemplo, después de la batalla de Tora Bora, Bin Laden y Al Zauahiri desaparecieron por las buenas en la zona fronteriza entre Afganistán y Pakistán gobernada por los dirigentes tribales islámicos. Seis años después del 11-S, continúan en libertad.
En contra de los consejos de los servicios de espionaje de todo el mundo, EE UU desvió su atención hacia Irak con el argumento de que Sadam Husein formaba parte de la conspiración. "En Oriente Próximo, hasta los niños se reían de esa asociación", dijo Fouad Hussein, un periodista jordano que se entrevistó con Al Zarqaui en la cárcel. Todavía más increíble era el arsenal de armas de destrucción masiva de Sadam; si lo hubiera tenido, lo habría empleado antes de la invasión.
Para justificar un ataque preventivo contra Sadam, se inventó un vínculo ficticio entre Bin Laden y el dictador iraquí, y así nació el mito de Al Zarqaui, el hombre de Al Qaeda en Irak. La fabricación de pruebas falsas por Estados Unidos y la obsesión de los medios de comunicación con Al Qaeda fue su mitología. Una historia interminable de sangre, violencia o heroísmo, dependiendo de quién la contara, sustituyó a la verdad: que, con la caída del régimen talibán, Al Qaeda había dejado de existir. Las masas musulmanas, oprimidas por dirigentes corruptos y antidemocráticos e indignadas por la humillación diaria de los iraquíes, y los occidentales, aterrorizados por sus propios gobiernos, se creyeron el cuento.
La vieja dirección de Al Qaeda, ahora firmemente controlada por Al Zauahiri, reforzó esa idea a base de explotar su notoriedad y utilizar los medios de comunicación e Internet para difundir su propaganda. Al Qaeda se convirtió en distintivo de calidad en el repugnante campo del terror islamista. Bin Laden llegó a pretender negociar una tregua en Irak tras el atentado de Madrid en 2004, cuando la verdad era que prácticamente no podía mantenerse a sí mismo en su escondite. A finales de 2003, Al Zauahiri escribió una carta a Al Zarqaui para pedirle dinero.
La guerra de Irak devolvió la vida a Al Qaeda. De sus cenizas surgió un nuevo fénix, el alqaedismo, una nueva ideología antiimperialista. La entrada de Al Zarqaui -su icono fundamental- en Al Qaeda, como emir de la organización en Irak, selló la transición. Las organizaciones armadas islámicas, costeadas durante decenios por Daw'ah, entraron pronto bajo este paraguas ideológico; desde los pequeños grupos escindidos del GIA en Argelia hasta los grupos locales del Reino Unido, todos adoptaron la etiqueta de Al Qaeda. Irónicamente, como hace seis años, Osama bin Laden y Al Zauahiri no controlan lo que ocurre en el mundo yihadista, pese a ser los símbolos más importantes de un movimiento mundial creado por la paranoia occidental.
El Gobierno de Bush y sus más estrechos aliados conocían la verdadera historia de Al Qaeda. Si no inmediatamente después del 11-S, no cabe duda de que la captura de figuras clave como Binalshibh y Abu Zubayda les permitió tener una idea muy clara de las luchas internas de la organización. También conocían su verdadero poder y su fuerza. Michael Scheurer, responsable de la Unidad Osama de la CIA hasta 1999, asegura que informó a sus superiores sobre los auténticos peligros de Al Qaeda antes del 11-S. Después del atentado, aconsejó que capturasen vivo o muerto a Osama bin Laden inmediatamente, antes de que se convirtiera en un símbolo, pero sus palabras fueron ignoradas.
Si hoy vivimos en un mundo mucho más peligroso es porque los políticos manipularon la verdadera naturaleza de Al Qaeda y convirtieron la visión que tenía Osama bin Laden de EE UU en una profecía autocumplida. Si se hubieran empleado los recursos para llevar ante la justicia a Osama bin Laden y Al Zauahiri, Al Qaeda habría quedado relegada a los libros de historia en lugar de ocupar las primeras páginas de los periódicos. El sexto aniversario de la tragedia de las Torres Gemelas parece una buena ocasión para empezar a revelar la verdad y utilizarla con el fin de llevar la paz a nuestro mundo. Callar a Bin Laden y Al Zauahiri no acabará con la violencia islámica, pero sería un paso en la buena dirección. Otro paso más sería el de dar con una solución a la pesadilla iraquí y poner fin al paralelismo entre Al Qaeda y la guerra fría. Pequeños pasos hasta que todos los mitos de los seis últimos años queden al descubierto y sean destruidos.

Thursday, September 06, 2007

el caso de los terroristas que eran alemanes conversos al islam causa inquietud en Europa

¿Qué podría empujar a dos alemanes llamados Fritz y Daniel a convertirse al Islam, y a continuación, según fiscales alemanes, embarcarse en una enorme conspiración para atentar en su propio país?.
Las noticias de sus supuestos planes ha conmocionado a los alemanes, pero no sorprende a los profesionales de seguridad, que conocen una serie de casos en diferentes países en los que convertidos al islam han abrazado la ideología de Al Qaeda.
Entre ellos, el británico Richard Reid, el "atacante del zapato," o John Walker Lindh, el "talibán americano, o el australiano David Hicks, el primer condenado por apoyo al terrorismo por un tribunal militar en la bahía de Guantánamo.
Muchos analistas creen que los conversos son más propensos a transformarse en extremistas al esforzarse en demostrar su compromiso con su nueva fe. "Quieren demostrar en las filas del radicalismo islamista militante que son profesionales que pueden manejar el terror y luchar contra los infieles," dijo Rolf Tophoven, director del Instituto para la Investigación del Terrorismo y la Política de Seguridad de Alemania.
Los dos alemanes, cuyos nombres completos no se conocen, fueron arrestados el martes junto a un turco en relación con un supuesto plan para atentar contra objetivos relacionados con Estados Unidos en Alemania.
El ministro del Interior Wolfgang Schaeuble dijo al diario Bild que no hay "una explicación simple" para el fenómeno de los convertidos extremistas.
"Uno pensaría que alguien que crece aquí y disfruta de las grandes ventajas de nuestra sociedad libre es inmune. Pero algunos son vulnerables. Son personas peligrosas, fanáticas con mucha energía criminal. Eso me preocupa mucho," dijo.
Según los expertos, la mayoría de las personas que se convierten al Islam lo hacen por legítimas razones espirituales, atraídos por una fe universal que trasciende las barreras nacionales y raciales y que les proporciona una nueva identidad, incluyendo un nombre musulmán.
Pero el estudio de varios casos muestra que una minoría abraza el islamismo violento como salida para sus alienaciones y frustraciones, explotando la religión como un arma para atacar a la sociedad.
"El recluta ideal de Al Qaeda sería un rubio de ojos azules, con un pasaporte de la Unión Europea o de Estados Unidos, que pueda pasar fácilmente por cualquier control de seguridad y que no encaje en los perfiles convencionales," dijo M.J.Gohel, analista de seguridad de la Fundación Asia-Pacífico de Londres.
En noviembre de 2005, Muriel Degauque, una belga de 38 años que nació en una familia católica se inmoló en un fracasado atentado suicida en Irak.

mas noticias sobre la celula terrorista islamista desactivada en Alemania

sobre la celula islamista radical desactivada en Alemania sigue fluyendo mas informacion
Alemania busca a diez sospechosos de colaborar con los tres detenidos de ayer
Los tres detenidos de ayer fueron entrenados en campos de Pakistán
Las autoridades alemanas buscan en la actualidad a diez sospechosos, presuntamente relacionados con Al Qaeda y que, según creen las autoridades de Berlín, habrían colaborado con los tres hombres detenidos ayer. Fuentes oficiales alemanas aseguran que los tres detenidos tenían inminentes planes para atentar contra objetivos estadounidenses en territorio alemán.
En este sentido, el Ejecutivo alemán baraja que "otros diez" presuntos terroristas más asistieron a los dos ciudadanos alemanes convertidos al Islam y al ciudadano turco, arrestados ayer y acusados de planear ataques inminentes contra la comunidad estadounidense en Alemania. Fuentes de seguridad aseguraron que entre los objetivos de la célula estaría el aeropuerto internacional de Frankfurt y la base militar área norteamericana de Ramstein.
Las fuerzas de seguridad alemanas hallaron en un escondite de los presuntos terroristas detenidos el martes, 700 kilogramos de peróxido de hidrógeno, material explosivo suficiente para fabricar una bomba con un potencial destructor equivalente a un artefacto compuesto por 550 kilogramos de TNT de haberse mezclado con alguna otra sustancia, según explicaron fiscales del caso en rueda de prensa. El potencial destructor era superior al empleado en los atentados de Londres y de Madrid.
Entrenados en Pakistán
La fiscalía ha identificado a los tres detenidos ayer como Fritz Martin G., de 28 años, Adem Y., también de 28, y Daniel Martin S., de 21. Los tres llamaron la atención de las autoridades por primera vez cuando vigilaron instalaciones militares estadounidenses en Hanau, cerca de Frankfurt, a finales de 2006.
En los siguientes seis meses, las fuerzas de seguridad observaron que había recabado contenedores de peróxido de hidrógeno al 35 por ciento, que según las autoridades puede ser mezclado para fabricar explosivos de alta potencia destructora.
La unidad antiterrorista de elite alemana GSG-9 arrestó a dos de los presuntos terroristas en una residencia de vacaciones en el centro de Alemania. Un tercer sospechoso huyó a través de la ventana del baño, pero fue capturado a escasos 300 metros de distancia, explicaron las autoridades. La Policía actuó después de que los tres presuntos terroristas comenzaran a trasladar los contenedores y a adquirir equipos empleados en la fabricación de bombas.
Los tres fueron entrenados en campamentos de Pakistán por la Unión de la Yihad Islámica y después formaron una célula alemana de la organización suní e inspirada en Al Qaeda. La Unión de la Yihad Islámica tiene su base en Asia central y constituye un grupo escindido del Movimiento Islámico de Uzbekistán, un grupo terrorista arraigado en este país.

Wednesday, September 05, 2007

las fuerzas de seguridad de Dinamarca y Alemania desactivan dos celulas terroristas islamstas en 2 dias

Buenas noticias: dos celulas terroristas islamistas que estaban a punto de causar atentados fueron detenidas por las fuerzas de seguridad de Dinamarca y Alemania en tan solo dos dias (en este blog estuve posteando notas que hablaban sobre la probabilidad de un atentado en Alemania):

primero el caso de Dinamarca:
Islamistas cercanos a Al Qaeda planeaban un gran atentado en Copenhague
La Policía danesa detuvo en la madrugada de ayer en once viviendas de la capital y sus alrededores, a ocho individuos, bajo la acusación de ser terroristas al servicio directo de Al Qaeda. Los arrestados, entre los que hay un taxista, un electricista y un panadero, todos musulmanes muy jóvenes (de entre 19 y 29 años), tenían material explosivo «inestable» en cantidades suficientes para llevar a cabo un ataque demoledor. Ese explosivo, TATP (peróxido de acetona), conocido como «la madre del diablo», es un producto sensible y fácil de fabricar. Las detenciones, consideradas de extrema importancia por los servicios de inteligencia daneses PET, han trastornado a la nación nórdica.
Jacob Sharf, jefe del Cuerpo de Inteligencia, en una conferencia de prensa celebrada a mediodía de ayer en Copenhague, afirmó que se llevó a cabo la redada contra los militantes islamistas después de haber establecido un cerco a los sospechosos, «para evitar un ataque terrorista, en una coordinación ejemplar con el cuerpo de bomberos y expertos en explosivos».
Aunque Sharf aseguró que «todos los detenidos tienen contactos internacionales con los líderes de Al Qaeda», no quiso contestar a la pregunta de dónde hubiera ocurrido el atentado y solamente dijo que trabaja de forma intensa con sus colegas europeos y que estaba convencido de que Al Qaeda, «más activa que nunca, y fiel a su escalada de crueldad, prepara un atentado».
Los cabecillas, ante el juez
Entre los arrestados, «todos radicales» de Afganistán, Pakistán, Somalia y Turquía, seis tienen nacionalidad danesa y los demás son residentes. Dos de ellos, considerados los cabecillas de la célula, pasarán a disposición judicial.
Sharf no quiso especular si el motivo de las actividades ilegales de los detenidos tenían relación con las caricaturas de Mahoma publicadas en septiembre de 2005 en el Jyllands Posten (www.jp.dk), o a la presencia de las tropas danesas en Afganistán.
Por su parte, la ministra de Justicia, Lene Espersen, ha calificado lo ocurrido como «muy inquietante». Afirma en un comunicado de prensa que hay que tomar muy en serio las sospechas del Cuerpo de Inteligencia y que en la actualidad hay en Dinamarca células terroristas islámicas preparadas a atentar.
En su calidad de ministra de Justicia, Espersen decidirá si todos los arrestados responderán de sus actos ante un tribunal.
La policia Secreta danesa detuvo en octubre del 2005 en la localidad de Glosterup a 27 personas sospechosas de ser militantes islamistas. Uno de ellos cumple una condena de siete años. En septiembre del año pasado otras 7 personas fueron arrestadas en Odense acusadas de haber fabricado bombas con el explosivo TATP. Hoy miércoles comienza el juicio contra ellos.
Un individuo original de Marruecos, que habia obtenido la nacionalidad danesa, también cumple condena de 3,5 años de prisión por repartir propaganda terrorista con escenas de ejecuciones de occidentales.

El caso de Alemania
Descarticulada una célula islamista que planeaba un macroatentado en Alemania
«Hoy es un buen día para Alemania», anunció la Fiscal Federal Monika Harms al resaltar en Karlsruhe que se había evitado un macroatentado al desarticular, a seis días del 11-S, una célula islamista con «cantidades masivas» de productos químicos, equiparables a las empleadas en Madrid o en Londres. La canciller Angela Merkel declaró que las detenciones mostrarían que la posibilidad de ataques terroristas en Alemania «no es un peligro abstracto, sino una amenaza muy real». Su ministro de Defensa, Franz Josef Jung, aseguró que la labor de espionaje de los grupos de élite GSG9 habían contenido «una amenaza inminente» para el país.
Para sorpresa de sus 900 vecinos, en un pequeño chalet de la localidad renana de Oberschledorn, en el centro occidental del país, tres presuntos terroristas eran detenidos junto a una gran cantidad de peróxido de hidrógeno y planes para preparar explosivos y atacar objetivos aparentemente norteamericanos en Alemania. La cantidad de sustancias químicas aprehendida habría servido para fabricar explosivos con un valor detonador equiparable a 550 kilos de dinamita.
Aeropuerto y base americana
«Un odio autodestructor», dijo la fiscal que guiaría a estos dos alemanes convertidos al islam, y a un ciudadano turco, de entre 21 y 28 años, relacionados con una organización terrorista de origen uzbeco y entrenados en Pakistán. Fueron identificados como Fritz G., Adem Y. y Daniel S. Otras ocho personas relacionados están siendo investigadas.
Los objetivos podrían haber sido instalaciones, residencias y discotecas frecuentadas por el ejército y la comunidad estadounidense en la región alemana del Rin, además del aeropuerto de Fráncfort y la base aérea de Ramstein, la mayor norteamericana en Europa. El secretario de Estado de Interior, August Hanning, aseguró no obstante que por los planes intervenidos no podían extrapolarse objetivos concretos.
El jefe de la Policía criminal federal (BKA), Jörg Ziercke, habló de una de las mayores operaciones policiales de la historia de la República Federal. Sus hombres, en número de 300 y tras seguir los operativos del grupo durante seis meses, intervinieron en el momento en que los planes de los conjurados empezaron a materializarse en la fabricación de bombas.
Por lo visto, debían ser cargadas en vehículos y detonadas en lugares muy concurridos. Ziercke destacó la cooperación de policía y servicios de distintos países y agradeció particularmente la ayuda estadounidense. El seguimiento de la célula había sido tan estrecho que, en un momento dado, agentes especiales pudieron sustituir uno de los productos por un sustituto inocuo.
El grupo o unión del Yihad Islámico (IJG), según expertos del Instituto de Estudios Orientales de Berlín, es un movimiento suní proveniente de Asia Central, en concreto de Uzbekistán. La respetada base de datos sobre terrorismo MIPT informa de que el citado grupo se escindió en 2004 del Movimiento Islámico de Uzbekistán, país donde llevó a cabo una serie de sofisticados y mortales ataques suicidas.
«El más peligroso»
En una entrevista reciente a este diario, el ex ministro federal del Interior Otto Schily calificaba el terrorismo islamista como «el más peligroso de nuestro tiempo y va en aumento». «Tiene otro carácter e importancia, porque es más internacional y no está organizado jerárquicamente; además, hay grupos espontáneos».
El ex ministro admitió la controversia constitucional de medidas como «el control de la comunicación por internet», y dijo que «entrar en un ordenador es más que un pinchazo telefónico. Pero, ¿qué hacemos si hoy la gente no se comunica por teléfono sino por internet? Pues seguramente tendremos que adaptar la Constitución».
Analistas destacaban ayer la interconexión entre grupos e iniciativas islamistas entre regiones y continentes, más que la existencia de mando y control. En las últimas horas han sido descubiertas dos tramas de atentados en la región, en vísperas del aniversario del 11-S. En Dinamarca, ocho militantes islámicos vinculados a dirigentes de Al Qaida, pero de los que no se han revelado los planes, y los citados en Alemania. Los expertos entienden que ambas tramas tendrían un preocupante sello común y relaciones que se extienden hasta Pakistán, donde se sospecha que se halla el núcleo de Osama bin Laden.
El Clingendael Institut en Holanda restaba importancia al nombre enunciado por los servicios alemanes: «Son parte de una idea, de un yihad (lucha santa) global; identificarlos y ponerles una etiqueta no responde ya a la realidad actual, todo es más fluido».